jueves, 4 de julio de 2013

amor

Bembos, viernes por la tarde.
-¿Cómo puedes decir eso?- lo interrumpo
-Que si, que tú no lo querías
-yo estaba enamorado…
-no, tú estabas enamorado de la idea que representaba D en tu vida.
-¿enamorado del amor, dices?
-no me lo tomes a mal pero supongo que D ha sido el mejor partido que has tenido ¿Desde cuándo? ¿tu adolescencia?
_ ¬_¬
-el chico hetero que se enamora del chico gay.
-no es hetero.
-bueno bi, pero para este caso representa lo que quiero decir, lo inalcanzable, la relación que está en contra de su familia…y la obsesión de que la tuya lo ignore, y que piensen que eres asexual por no decir un eunuco sin vida sexual.
-…
-¿Cuántas veces quiso formalizar? ¿dos, tres? Y siempre fuiste tú el que quería que todo siguiera igual. Al ser padre, te agrado la idea de la familia semicompartida, teniendo los buenos momentos pero no asumiendo los malos. Una responsabilidad a medias no es responsabilidad. Con esa idea de querer ser y no serlo, tu paternidad frustrada se veía apaciguada a las tardes de niñera para con el hijo de tu novio, haciendo una relación malsana que ya solo se basaba en los pocos momentos en que podían estar y asumiendo el estar por estar para lograr…- se calla.
Me mira como diciendo, ¿me he sobrepasado?
-síguele, anda, psicoanalízame.
-me he pasado tío.
-no, no, si lo tienes bien claro.  Soy el chico nerd de secundaria que por fin consiguió algo decente y que vive su ilusión con un chico mejor que él.
-no dije lo nerd, pero…
Mirada asesina hacia Juan Carlos. Se queda callado.
-eso explicaría porque tantas veces terminaron y volvieron. Eso explica porque luego de terminar te atrae algo tan poco prometedor como el princeso, porque tu negativa a darme una oportunidad y porque esa expresión que hace un tiempo un ex te dijo, tu saboteas tus relaciones.- continua
-¿Quieres que te diga por que no te doy una oportunidad?
-¿lo harías?
-¿en verdad quieres que te lo digas?
-estoy esperando.
-porque no quiero malograr la relación que tenemos… porque te llevo casi 10 años...
-en realidad son 9…
- bueno 9 años, porque creo que puedes encontrar a alguien mejor que yo, alguien que de verdad… aishh… que no tenga tantos problemas como yo, en la cabeza… alguien que de verdad se la juegue al 100% por ti, alguien que te quiera y que te saque esa estúpida idea de que no eres alguien que merezca ser amado, me tienes huevón, con el rollo a lo Juan Gabriel,  yo no nací para amar, nadie nació para mí. ( frase dicha con voz mongoloide)
Tienes 26 años, no son nada. Tuviste una decepción amorosa, te dejaron, te pusieron los cuernos ¿a quién no? SUPÉRALO. Yo no soy el indicado, habrá alguien que lo sea.
Y en cuanto a mí. Yo si me enamoré. Quizás algunas cosas que dices sean ciertas, pero yo amé, arriesgué, me la jugué, metimos la pata, lo arruinamos, se acabó el amor, no sé. Pero lo intentamos. Y ese sentimiento de haber entregado todo me deja una sensación de paz. De que no tendré remordimiento después. Porque las cosas hay que superarlas y mirar para adelante. Claro que me da pena, y nostalgia, no soy de fierro pero asi son las cosas, el que no esté llorando por que termino mi relación no significa que no sienta, significa que no me quiero sentir mal por el hecho asumido de que la relación ya no iba para más, además con el tiempo he aprendido a manejar mis depresiones. Tuve que hacerlo. La última me dejo destrozado llorando por las noches, y sin dejarme concentrar en nada, mi vida fue un caos, logré superarlo, pero fue con tiempo. No quiero volver a caer en eso. No lo haré. Así que antes de contarnos nuestras penas, mejor terminemos de una vez, que se nos hace tarde para entrar al cine.

Ambos hacemos silencio.
Juan Carlos termina lo que queda de su hamburguesa, yo sorbo lo último de mi Inka kola. Y nos levantamos callados con dirección al cine.

pd: vimos Monster University, no nos gustó mucho
pd2: es mi post 700 =)
 

miércoles, 3 de julio de 2013

Henry Licett y la peneflexia


Alguna vez has jugado a estirar tu pene y darle forma, esconderlo entre las piernas o hacer figuras con él. ¿No? Yo tampoco. Pero hay un espectáculo llamado 'Puppetry of the penis' (las marionetas del pene) que juega con la peneflexia, que consiste en estirar el pene o los testículos para formar figuras en medio de diálogos irreverentes y divertidos (si quieres ver como se hace 'la hamburguesa' con el pene, haz click aquí, pero ten en cuenta que es solo xa adultos)
Cuando me enteré de eso, no me llamo mucho la atención porque a decir verdad, los que presentaban el show eran bastantes ‘buena gente’ y asi no entusiasmaba verlo. Pero aquí en Latinoamérica se está haciendo una versión con el papacito de Henry Licett, que está más rico que pie de limón.

Más fotos en mi otro blog. Las fotos al final son de ‘El show del pene’ y están censuradas, pero puedes ver toda la galería de ellas en este link http://minus.com/mzjPBPQHljZzo













































 




  


 















































 



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