jueves, 4 de diciembre de 2008

Lalo y Lalito (parte I)


Iba a publicar algo pero me di cuenta que no tendría mucho sentido si no hago un resumen antes, así que mejor les entrego este breve relato que escribí cuando tenia 16 años, los hechos son los mismos, todo eso paso en realidad solo cambia el nombre del protagonista (o sea Ben soy yo), esta fue la historia de cómo conocí a Eduardo (lalo)

Eduardo
Tenía prisa, estaba apurado.
Benjamín Rengifo quería llegar a tiempo para ver el Banquete de Bodas, pero lo sofocante de la fila impedía que se aprendiera los cinco conceptos que necesitaba para salir. Hacer cola para salir recitando de paporreta los cinco conceptos no era precisamente su idea de enseñanza de calidad, pero bueno.

Y si bien la academia no era la gran cosa, a Benjamín le gustaba, se hizo amigo rápidamente de cucaracha, otro escolar como el, ambos eran los únicos con sus uniformes plomos, esos horribles uniformes plomos.
Cucaracha no vino a clases y Ben tendría que ir solo al cine, que se va a hacer pues- pensó.
Esto de la academia pre-universitaria no estaba del todo mal, la idea era aprender durante su último año escolar y tener cierta base para prepararse en serio y postular a la universidad.
Cuando logro salir Ben cruzo la av. Salaverry corriendo pues al parecer ya era tarde, no espero demasiado para tomar la combi que lo llevaría al centro de Lima.
No conocía el cine Bijou así que no solo tenía que ir de prisa para no llegar tarde sino también para ubicar el bendito cine.
El tránsito era insoportable, Ben con hambre a pesar de comerse tres paquetes de galletas, todavía no había almorzado con la mirada perdida viendo como camina la gente, todos apurados, distraídos y de pronto cuando alzo la mirada hacia el frente vio que alguien lo miraba por el espejo retrovisor del chofer, esta persona estaba sentada detrás del chofer y gracias al espejo retrovisor podía ver a Ben.
¿Pero porque si esta viendo que lo observo no desvía su mirada? Inconscientemente y quizás por curiosidad Ben persistió sin desviar la vista y el sujeto al parecer pensaba lo mismo, esto parece un concurso de miradas, el primero que la desvía pierde, y yo no pienso perder se dijo Ben.
Se miraron unos 10 minutos hasta que el desgraciado del conductor movió el pequeño espejo. O sea que encima que vas como tortuga, sin abrirte a al izquierda, tocando como imbécil el claxon y con la radio a todo volumen como para que toda la av. Salaverry escuche los quejidos de Laura León cantando Dos mujeres un camino, te atreves a moverme el espejo retrovisor, bendito espejo que me proporcionaba algo de distracción mientras llego al sucio y peligroso centro de Lima, ¡ah no! Yo me bajo y me voy corriendo que de seguro llego mas rápido pero acaso uno ya no puede flirtear en la combi con el primer desconocido que te mira con esos enormes ojos y largas pestañas. Asi no vale pues, exijo una explicación-pensaba enfurecido Ben.
La combi por fin avanza rápido y sin que se de cuenta Ben ya esta en la av. Wilson. Con 15 años apenas, Ben no conoce muy bien el centro de Lima así que prefiere bajar en la colmena.
Bajar en colmena es caminar entre decenas de ambulantes, pasar entre tipos que reparten cientos de volantes, tipos que te quieren jalar para que te matricules en ese último curso de computación, estudiar ingles, oratoria, u otra academia pre-universitaria.
Las calles están llenas de esos volantes en el piso, los autos tocan insistentemente sus claxons.

En el piso venden de todo, desde cortaúñas, libros piratas o medias, pero a Ben le intereso unas revistas Smash Hits con carátula de su serie favorita, al frente cruzando la pista avanzaba su amigo de la combi.
No tuvo tiempo de verlo bien, pues la gente lo empujaba para avanzar, caminan apurados, deprisa quien sabe para donde, a propósito adonde tenia que ir .
¿Jr de la Unión verdad?
Ben no conoce el centro de Lima y en estos meses hay gran cantidad de gente pues han iniciado la construcción de un by pass en la plaza Dos de mayo haciendo aun mas intransitables las calles.
Pero mientras avanzaban por jr. de la Unión esquivando vendedores de mascotas, de vestidos, de zapatos, o limosneros impresentables vio que a su lado un poco mas adelante iba el chico de la combi.
Antes de llegar a la plaza de armas dentro de una galería esta ubicado el BIJOU, el cine esta en el sótano, descuidado un cartel de la película muestra los reconocimientos del film; parado a un lado, el chíco de la combi conversa con la señora que vende las entradas.
La galería esta bastante oscura, varias de las tiendas están desocupadas un par de focos en el techo alumbran la entrada al cine. Ben se acerca.
-dicen que ya a empezado- dice el chico de la combi
-hace rato?- pregunto Ben.
-media hora.-responde
-no pienso verla comenzada- dijo Ben acercándose al cartel de la película.
-Todos quieren besar a la novia menos el novio leyó Ben
Hubo un largo silencio, Ben sabía que el chico le gustaba, se habían estado viendo por el espejo retrovisor de la combi, así que no le deb6 ser tan indiferente- pensó.
¿Porque no vamos a hacer hora hasta la próxima función?-le pregunto a Ben. Pero este no contesto, se quedo pensando si esto de verdad estaba pasando; que lamentaba no haberse puesto su otra chompa de colegio que le quedaba mejor, que porque no cargaba un peine consigo porque ahorita esta hecho un desastre, que todavía no recordaba el número, recién instalado, de su casa para asi avisar que llegaría tarde.
-disculpa, yo soy Eduardo- le dijo mientras extendía la mano. Ben se la estrecho
-¿Y tu eres? Le pregunto
-Ben. Benjamín Rengifo, pero me llaman Ben.
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El camarero todavía no se acerca, esta ocupado atendiendo un pedido de un par de gringos su rostro evidenciaba que no entendía bien lo que le pedían.
¿y en que colegio estudias? —pregunto Eduardo porque fue lo primero que se le ocurrió, pero ni bien termino de hablar pensó que había dicho una estupidez, la pregunta típica a un escolar ¿en que colegio estudia? Se repitió mentalmente. Si seré bestia pensó
- bueno .. . este, en el Salvador Dalí aquí en la av. Venezuela por San Miguel- dijo mirando bacía cualquier lado, menos a la cara de Eduardo, estaba muy nervioso como para verlo a los ojos si sentirse un imbécil-poca-cosa con su uniforme escolar que valgan verdades estaba ya bastante trajinado como que era el que le compraron el año pasado y que comenzando quinto año ¿para que comprarle otro si este todavía estaba bien?
El mesero ya se había acercado, Eduardo pidió dos cafés, como para calentarse del frío que hacía pensó.
-entonces ¿Qué piensas hacer luego que termines el colegio? ¿Por qué supongo que este año acabas verdad?
-ahorita mismo acabo de salir de la pre.
-franco osea que estudias en la mañana?-dijo eduardo poniendo ambas manos alrededor de su taza de café que le acaban de traer
-aja, pienso estudiar ciencias de la comunicación
-¡ah! Caramba un futuro periodista- sonrió Eduardo
-mmjú. Alcanzó a musitar Ben, sorbiendo su café.
Nunca antes le había gustado una persona a Ben como le gustaba ese muchacho
Tampoco habla conocido uno tan guapo antes, pero el hecho fundamental de que a Benjamín le atrajera un chico no era novedad.
Eduardo es blanco metro ochenta de estatura de contextura atlética (aunque eso lo sabría después pues el no podía adivinar debajo de sus ropas) llevaba su cabello peinado hacia atras con un gracioso tupe a lo James Dean con su marlboro en los labios, la casaca y sus jeans gastados con flecos en la basta como usaban los chicos de moda en ese entonces.
-¿Y tu que haces? ¿Cuántos años tienes?-dijo por fin con algo de valor
en el restaurante - polleria se escuchaba por enésima vez bolero de Luis Miguel.
-Tengo 23 años estoy en la uni, estudio ingeniería industrial.
-¡Ah!- Dijo Ben pensando que aburrido salir con un ingeniero hubiera preferido que estudiara derecho, no se medicina hasta educación creo, pero ¿tendré algo en común con un patita que estudia ingeniería?
-no tienes idea de lo que hace un ingeniero industrial ¿verdad? Adivino eduardo.
-aja, no tengo idea- respondió Ben algo apenado Eduardo se rió.
-pero no te rias pues.
-disculpa es que .. ¿Quieres que te diga algo?., es la primera vez que flirteo con un chiquillo de ¿quince, dieciséis?
-quince , ¿Qué es flirtear? Dijo Ben terminando su café.
-coquetear.... Eduardo penso dos veces lo que iba a decir antes de continuar.- enamorar.
- ¿me estas flirteando? -dijo avergonzado Ben.
-si- dijo serio Eduardo mirándolo a los ojos a su joven amigo.- pero no esperaba que te sonrojes.
-disculpa no, no, no estoy sonrojado- mintió Ben pues sentía acalorado su rostro.
-no importa me gusta verte así.
-¿sabes? me tengo que ir- dijo nervioso Ben.
-Pero ¿y la película?
La puedo ver otro día- dijo poniéndose la mochila al hombro.
-¿cuando?
-la próxima semana
-eso es mucho tiempo
-bueno, no se
-me llamas, te dejo mi número
-ya pues.
Ben cogió el papel que le extendió con el número de teléfono. Eduardo xxxxxx decía, se lo metió al bolsillo de su camisa y sin agradecer el café apuro el paso pensando que no se atrevería a llamarlo.

pd: Escrito ficcionado de lo que pasó en realidad.
pd2: puedes leer la segunda parte aquí 
 

6 comentarios:

  1. wow las historias de ustedes los gays son realmente interesantes, nose porke a los heteros no nos pasa cosas asi a menudo.

    Y como dices ke no hay caballeros y el, te invito un cafe o no?

    Gracias por la visita =)

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  2. Ok! ya conocimos a Lalo ... y ¿quién es Lalito? , disculpa la impaciencia.
    (Y tu te burlabas del Julieta! ¿existirá todavía el Bijou? ja ja)

    Siempre es bueno tener a mano el cofrecito de los encuentros casuales, suelen ser estupenda compañía en tardes frías.
    ;?)

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  3. Uhhh, en serio, citando a mi amiga Miluska: "sus encuentros son apasionados y trascendentes". Qué bueno que lo hayas escrito para recodarlo. Yo tengo un cuento similar del año pasado, te dejo el link.

    http://ohmigay.blogspot.com/2007/11/jean-et-guillaume.html

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  4. AH...Ya quiero ver la 2da parte de la historia. jojojo. Te leo...Saludos!

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  5. ninfa cafe..:tu pag en reconstrucción jijiji siempre se agradecen alegatos feministas
    fabumona:el Bijou ya no existe compartian peliculas con el pacifico y el orrantia. el banquete de bodas es de mi director favorito ang lee, tienes q verla fue nom. a mejor película extarnjera es una comedia de una pareja gay
    nano-boy: lei tu historia es linda mas romantica que la mia
    maxito: la 2da parte pronto mientras divago con "interludio-soy medio idiota por que..."

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  6. Bueno, está intereante, la cosa... pero qué pasó? Hay una segunda parte, no la encuentro. Pq se casó y tuvo un hijo?

    Oye, cari, en tu blog esta todo el rato saliendo una cosa par meterter en el twitter, y es un poco rolo, la verdad, eh, dicho con todo elcariño, pq sale cada vez que pinchas en un post...

    Bezos

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