martes, 14 de mayo de 2013

Juan Carlos

Tomado de mi pronto desaparecido blog día a día
y solo para dejar constancia de como fui conociendo a Juan Carlos.
-entre el 15 y el 20 de enero 2013-

Día 4- Juan Carlos

Tiene 25 años, trabaja en una editorial, le gusta el cine de Tarantino, su película favorita es Kill Bill, esta descubriendo el cine de terror oriental, escucha de todo, no es prejuicioso con los gustos musicales, ni personas.  
Usa Old spice, lo sé, porque salía con un tipo que se echaba lo mismo.
Le gusta la comida marina, lo primero que hizo es invitarme un cebichito cuando fuimos a La punta. Le gusta tomarse una cervecita fría después de cada almuerzo. No maneja. Toma taxis que le parezcan limpios, no cualquiera, y si el conductor no le causa desconfianza lo aborda, copia la matrícula y se la manda a su mejor amigo. A quien no conozco, pero siempre menciona, supongo que si lo nuestro continua, un gran paso sería que me lo presente.
Le cuento mi historia previa, todo lo acontecido en el último mes.

-Es como dejar a un Eric Bana por uno como Shia lebouf
-Claro, y yo sintiéndome un John Turturro en los 30s- contesto emo
-Jajaja, no, tu eres más como un Dustin Hoffman joven- me dice
-Genial, soy Rainman, jajaja, no me ayudes, gracias.
-No. Como cuando el hizo El graduado, ¿la viste?
-claro es de mi películas favoritas- respondí sorprendido
-tuturururu – tararea una melodía conocida e inmediatamente se pone a cantar en ingles
-Hay no puede ser, otro que se le da por cantar- dije susurrando
-¿Cómo?
-No, que... te sabes la canción en ingles
- Si. En el colegio nos enseñaron algunas en clase de inglés.
Benjamin Braddock
La conversación sigue entrecortada, Juan Carlos es divertido e ingenioso sin decir pavadas tontas, y nos quedamos hablando sobre lo que creemos que paso con Lost, aunque ninguno de los dos la vimos completa. Terminamos cenando muy tarde una hamburguesa en un conocido fast food.
De pronto, extiende su mano y limpia  un poco de mayonesa de mi labio superior, y sigue conversando.

Pudo decirme, oye límpiate ahí señalando su propio labio, pero no, él estiró su brazo y me limpió, asi super paternal (o super lindo, como quieras verlo)

Al despedirse me dijo: Chau "Benjamin"

Nota mental: Volver a ver El graduado

otrosi: escribir seguido no me va, quizás me salteé algunos días


 pd: les dejo el video de la canción que tarareo y cantó. Se llama Mr. Robinson de Simon & Garfunkel, de la película "El graduado", como decía una de mis películas favoritas.


8 comentarios:

  1. jajaja, amo esa cancion y ese detallito de manosearte la boca...bueno eso XD, fue paternal ...bueno siempe es muy lindo recordar a la gente en sus grandes momentos con nosotros no?
    besos

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    1. conocerlo -personalmente, que ya habiamos hablado antes- fue una de las mejores cosas que me han pasado este año.

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  2. Yo soy medio fastidioso para eso, si alguien trae algo en la boca se los digo, pero ya tocarle el labio se me hace un poco... personal. O rompe-límites. O lo que sea.

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    1. a mi tambien, pero hay gente que es asi, más rompe límites como dices

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  3. Me encantan Simon & Garfunkel, y también Dustin Hoffman.

    Un buen principio.

    Un abrazo.

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  4. Vas a cerrar tu otro blog? Ay mejor que hace recordar los días tristes :(

    Besito <3

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  5. Qué buen detalle de él y qué buenos recuerdos fueron los que te dejaron esas salidas :)

    A veces parecen perfectos pero algo en nosotros no termina de convencerse y seguimos buscando un "indicado"

    Saludotes!

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  6. Wow... muy interesante de verdad, a mi también me encanto ver el graduado es una de mis películas favoritas y cuando leí la parte tuturururu en mi mente entro esa canción jajaja
    Películas como esas con únicas xD
    Un Gran saludo

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